
Nanowallet


Nanowallet de NEM: Un Centro de Votación en tu Smartphone
Ucrania y otros países a escala regional quieren unirse a la revolución Blockchain para renovar sus mecanismos de consulta. El proceso es tan fácil, rápido y económico que cualquiera, desde su teléfono, puede hacer su propia contienda electoral, tal como te lo enseñamos aquí.

Comprendamos qué es el POI de NEM
Como cada día somos más quienes queremos saber sobre Blockchain siempre es necesario recordar los términos básicos que diferencian a NEM de otras cadenas de Bloques. Hoy te explicaremos qué es la Prueba de Importancia.

Pronto podrías elegir a tu Presidente usando la Nanowallet de NEM
Un experimento conducido por la autoridad electoral de Ucrania y el capítulo local de la Fundación NEM.io deja abierta la posibilidad para usar tecnología Blockchain de NEM en los futuros comicios.
Por Alexis Trujillo R.

¿Qué pasaría si NEM solo fuera XEM?

Para todo aquel apurado que piense que responder esa pregunta es rápido y aburrido demos de una vez la respuesta: Sería un titán entre las criptomonedas; mucho más de lo que es, pero no tendría una Comunidad como la que tiene. El problema es que, a la larga, se convertiría en una pobre moneda más.
Por Alexis Trujillo R.
NEM no tiene siquiera 5 años como Proyecto de Blockchain. Es el resultado de una conversación que inició un grupo de desarrolladores en un foro y cuya ambición era aprovechar la novedosa programación compartida de la Blockchain para cambiar el modelo económico basado en el valor de las propiedades y servicios.
Este grupo resumió sus propuestas en una serie de bases filosóficas que terminaron convirtiéndose pilares de una Blockchain con tres atributos característicos:
El Primero, construir una comunidad que comprendiera que el intercambio de valores en la sociedad es tan importante como el valor intrínseco de los objetos y el conocimiento además de crear un sistema que brindara soluciones a problemas reales para garantizar su utilidad.
El Segundo, proponer un algoritmo de consenso distinto, pues al no estar basada solamente en la propiedad de los valores, la criptomoneda que se hiciera para circular entre esta comunidad tenía que tener rangos más dinámicos para certificar su riqueza y que permitiera que cada usuario, haciendo más y más intercambio, tradujera sus acciones en mayor prestigio dentro de la comunidad y a la vez le hiciera ganar en su patrimonio propio y colaborara con el patrimonio colectivo.
El Tercero, otorgar a los miembros de la comunidad una cartera que simplificara y facilitara todos los servicios que puede ofrecer la Blockchain, desde enviar o recibir su propia criptomoneda (es obvio) hasta procedimientos complejos como registrar la autenticidad de un título de propiedad.
Por eso NEM tiene esta valiosa Comunidad de Usuarios y Desarrolladores que aporta soluciones concretas a Casos de Uso reales; tiene la Prueba de Importancia (o POI, por sus siglas inglés) como Consenso para conferir valor a su moneda y la relación entre los miembros de la comunidad, y la Nanowallet, que es el centro de operaciones individual de los miembros de la comunidad y que tiene funciones tan avanzadas como permitir ejercer el derecho al voto sobre eventos y decisiones que la Comunidad quiera tomar para su fluidez y beneficio compartido.
Como muchas Blockchain, como casi todas, NEM tiene su criptomoneda, el XEM. Si la Fundación NEM.io se ocupara solo del valor de ésta, sus labores serían las mismas que las de cualquier banco nacional o institución financiera global. Es decir, su trabajo sería solo hacer circular el dinero para generar riqueza para y por desde la riqueza misma. Como no es la única criptomoneda del ecosistema, habría que hacer mucho esfuerzo para competir con todas las existentes, estar presentes en todos los mercados, y eventualmente tendría el mismo destino que todas las monedas: Su valor caería cuando no haya nada que comprar o vender.
NEM va más allá de ese mezquino concepto. La Comunidad NEM sabe, reconoce, que es el trabajo conjunto y compartido el que realmente certifica la riqueza. Casi podemos afirmar que la verdadera riqueza, el verdadero valor de NEM, está en su Comunidad.
Los economistas se han quebrado la cabeza los últimos 300 años en explicar cómo las sociedades pueden generar riqueza y repartirla de una forma u otra. NEM también está contribuyendo con su propuesta. Quizás de aquí a 300 años más, la alternativa que NEM está ensayando sea un estándar; quizás no, también hay que decirlo. Lo importante es que por ahora está demostrando que sí es posible aplicar esta fórmula con éxito.